En 1990 abría sus puertas CENTRO PLAZA, el primer centro comercial de Nueva Andalucía. Fue entonces uno de los primeros establecimientos en agrupar, bajo un mismo recinto y marca, a distintos locales de ocio y negocio en Marbella.
Dicho proyecto fue concebido en sus inicios por la promotora Centro Comercial Nueva Andalucía S.A. (dirigida por Alfonso Fernández Rodríguez y Alberto Vidiella Tudores), quien visualizó la necesidad de emplazar el nuevo centro comercial en la emergente y selecta zona residencial de Nueva Andalucía.
Hoy tenemos el honor de estar con Alfonso Fernández, uno de los promotores y primer administrador del centro, para conocer su opinión sobre estos 25 años:
¿Por qué un Centro Comercial hace 25 años en Nueva Andalucía?
No fue una idea abstracta, casual, sino que surgió de la experiencia, de comprobar las necesidades comerciales y de negocios reales que tenía Nueva Andalucía en sus inicios. De ahí, que en la promoción de Centro Plaza se dedicarán las plantas altas de los dos edificios que lo conforman a oficinas y el resto a locales comerciales y servicios.
¿A qué es debido el éxito de Centro Plaza?
Sin duda, a la suma de numerosos talentos y esfuerzos en estos veinticinco años, y gracias también a los usuarios residentes de Marbella como extranjeros que eligen los productos y servicios de Centro Plaza.
Trascurridos 25 años, ¿qué destacaría de Centro Plaza?
Su óptimo funcionamiento, tenemos en la actualidad un 95% de ocupación de firmas, con 20 sectores diferentes integrados, que incluyen una marca fuerte de supermercados, servicios bancarios e inmobiliarios, restauración internacional, moda y complementos, gimnasio… y otros perfiles de negocio que pueden visitarse en nuestras instalaciones… y conocerse ya también en nuestra web.
De ahí, mi más sincero agradecimiento a todos los propietarios e inquilinos que apostaron y apuestan por Centro Plaza para el desarrollo de sus inversiones, negocios y comercios; y, por supuesto, muy agradecido también a la clientela multicultural que nos elige cada día.
